Hoy en www.poderjudicial.cl, dentro de la información contenida en una de las 12 causas de famila que se han iniciado en estos últimos 4 años con mi RUT, me encuentro con la sorpresa de que la abogada del padre de mi hija insiste enfáticamente en que me lleven presa lo antes posible a la cárcel de mujeres.
Ella es madre y me junté con ella la semana pasada a conversar de mujer a mujer, gracias a su hermano que es mi amigo y facilitó este humano encuentro.
Sin embargo nuevamente aparece un escrito lleno de mentiras, donde se me culpa de no cumplir un régimen de visitas dictado por una jueza, que nada tiene que ver con lo que es mejor para una niña de cortos 3 años de edad.
Lo mejor para mi hija no es necesariamente tener que irse a dormir a la casa de su padre. Un tipo que jamás ha querido quererla, sino más bien, hacer su voluntad por terquedad.
Nadie jamás ha entendido que si dejé de entregársela los fines de semana por medio que estaban decretados, ha sido por protegerla de manos de este hombre que jamás ha sabido cuidarla y que la ha expuesto a tantos malos tratos desde los inicios de su gestación como hasta ahora.
No había tenido corazón para entregarla de nuevo luego de que me la entregara el pasado 5 de septiembre de 2010, sí, hace 11 meses, con moretones en su cara, fiebre, excremento en su ropa interior y desarmada emocionalmente ya que su padre y su polola la habían golpeado contra la pared por haberlos despertado muy temprano ese domingo.
A tribunales le importa fallar sobre hechos contundentes y nada esto es demostrable ni contundente. Sí es más fácil creer que soy una mujer despechada enamorada de un tipo capaz de hacer este tipo de cosas.
Ya tienen mi dirección correcta, una orden de allanamiento y descerrajamiento de mi domicilio. Mi hija no entiende nada y no quiero imaginar lo que sería que ella me viera ser llevada por la fuerza pública a la cárcel.
Nadie escuchó que este tipo es un descontrolado en todo lo que a impulsos se refiera, que tiene una personalidad adictiva que lo ha envuelto en asuntos siempre ligados a drogas y a prostitución y que cuando se le ha dado la oportunidad de cuidar a mi hija, porque yo misma sin apremios legales perseguí ese derecho de ella, él la abandonaba, la descuidaba al punto de aplastarla borracho, quemar una carpa con ella adentro, dejarla a la orilla del río a los 3 meses de edad rodeada de perros mientras él nadaba, me la quitaba en la calle y me la devolvía muerta de hambre en tiempos de lactancia exclusiva, me golpeaba, me cortaba los cables del teléfono de la casa, entre muchas cosas.
Hoy no doy más. Tengo dos nuevos abogados y daré todo lo que soy con tal de obtener lo que sea mejor para ella.
Estoy dispuesta y abierta a que me demuestren que estoy equivocada, y ojalá que así fuera. Pero tener que estar desde el día en que el nos dejó, a los 4 meses de embarazo, el último día de julio de 2007, sufriendo su violencia sicológica y la falta de credibilidad de todo el sistema judicial con respecto a mi historia, es repugnante.
"A mi hijo le sacaste un hijo a la fuerza y vas a tener que cuidarlo mientras esté en tu guata, porque esa guagua es mía y va a estar siempre conmigo porque tiene mi sangre" - "No supiste ser lo suficientemente geisha con mi hijo. Te lo entregué en bandeja y te lo farreaste" - "El es maravilloso como su padre, el rey de los gitanos, quien jamás se casó conmigo por ser chilena y tu te das el lujo de no quedarte con la copia de ese hombre que hace 40 años amo con locura" - "El respeto de un hombre hacia su mujer no pasa por la fidelidad, sino porque él no permita que te enteres de las cosas que él tiene pleno derecho a hacer con otras mujeres" - fueron las palabras de la abuela paterna de mi hija, el mismo día que desmanteló mi casa mientras trataba de proteger mi guatita de tanto frío, vacío y desgarramiento de dolor.
Esa noche, del 31 de Julio, abracé a nuestro perro oculta en la oscuridad de la bajada de cerro donde estaba la casa que compartíamos. Se veía la casa vacía recortada en la oscuridad. Sin cortinas ni muebles. Todo se lo había llevado el padre de mi hija con su madre y su hermano. Lo último que escuché fueron los motores de las 3 camionetas encenderse y el grito de llamado al perro: Maaax! Maaax! Max intentó quedarse, pero su instinto fiel lo hizo partir corriendo y abandonar la casa con todos ellos...
Hoy mi hija desconoce esta historia, y sólo quedan centenas de páginas escritas con mentiras en tribunales que espero algún día, aunque sea conmigo en la cárcel, se esclarezcan.
estoy en SHOCK.. con angustia ,, se me revuelve todo!! y este blogs es el grito desgarrador de una madre!! hay que difundirlo.. !! Dios te ilumine no te caigas, ve al sernam !! ato do!!! mandare tu blog muchas partes!! y ya veras haremos una cadena!! fuerza , como madre se k somos leonas ,, para proteger, kanguras para cargar con nuestros hijos para todas partes,, mama gallina para protegerlos bajo nuestra ala.BENDICIONES!!
ResponderEliminarGracias Florencia... ! Tus palabras me llenan los ojos de lágrimas y el corazón de esperanza de saber que voy a poder contar con el apoyo moral de otras madres que entiendan lo que estoy pasando. Tengo la convicción de que esto va a resultar, y estoy armando este blog sin decir mi identidad ni involucrar a mi familia, por el dolor que significa leer todo esto, para que no se agilice mi proceso de arresto y el padre de ella no me acuse de más cosas... Rompí mi silencio y agradezco tu acogida... Un abrazo.
ResponderEliminarñatita ya veraz que te llegaramucho apoyo, guia y mas de una puerta se te abrira.. todo mi cariño y energuia un abrazo
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